Edición por Perla Camacho Camarena
El sistema de puntuación del INFONAVIT entró en vigor el 16 de abril de este año. Desde hace más de veinte años, a los derechohabientes del INFONAVIT se les exigía juntar 116 puntos para tener derecho a solicitar su crédito.
Para calcular esta puntuación, el instituto tomaba en cuenta los siguientes factores:
Al trabajador le tomaba entre uno y dos años juntar los 116 puntos para poder solicitar su crédito, siendo el factor más importante el monto de su salario. A partir de las reformas constitucionales en el INFONAVIT promulgadas en octubre de 2020, los derechohabientes tienen que juntar 1080 puntos en lugar de 116. Evidentemente, 1080 es un número mucho mayor que 116.
El INFONAVIT, a través de su director, Carlos Martínez Velázquez, de sus redes sociales y de un sinnúmero de artículos en periódicos y revistas han tratado de convencernos de que es más fácil y justo juntar 1080 puntos que 116.
“Más puntos no significan más requisitos sino que ahora, el INFONAVIT tomará en cuenta más factores para evaluarte y ya no solo tu edad, salario o tu ahorro en la Subcuenta de Vivienda”. Esta fue la declaración que el director estuvo difundiendo a través de distintos medios, la cual parece propaganda pagada.
Resulta notable la similitud de varios artículos que se publicaron en diferentes medios escritos. Considero que vale la pena compartir los enlaces para que se constate que se trata de la misma nota, validando así la imposición del nuevo sistema de puntaje.
AS México: https://mexico.as.com/mexico/2021/05/28/actualidad/1622156034_104192.html
La Jornada: https://www.lajornadadeoriente.com.mx/tlaxcala/infonavit-puntaje-credito-hipotecario/
Yo sostengo que, a pesar de todo el esfuerzo que ha hecho el INFONAVIT por demostrar que el nuevo sistema de puntación es mejor que el anterior, es injusto y afecta a una gran cantidad de trabajadores, sobre todo a los que trabajan en microempresas.
Los nuevos criterios son los siguientes:
Los primeros cuatro incisos tienen que ver con los méritos individuales de cada trabajador. El resto de los incisos califican a la empresa. Esto es totalmente injusto y arbitrario.
La empresa o patrón debería de ser calificado en otro esquema con los premios o penalizaciones a las que el empleador se haga acreedor. Si el empleador tiene una mala estabilidad laboral o un mal comportamiento de pago, se castiga al trabajador con una puntuación baja alejándolo de la posibilidad de ejercer su crédito.
El inciso “g” no solo es absurdo sino también discriminatorio. Bajo este criterio, el INFONAVIT califica al trabajador de acuerdo con el giro y la ubicación de la empresa donde presta sus servicios. El INFONAVIT debería de aclarar o sacar una lista de cuáles son los giros y las ubicaciones que dan más puntos.
Hay otro aspecto que el INFONAVIT ni siquiera es capaz de informar de manera clara. 1080 puntos son los mínimos requeridos para tener derecho a un crédito, pero si únicamente se juntan de 1080 a 1089 puntos, el INFONAVIT solo otorgará el 80% de la capacidad total de crédito, si junta de 1090 a 1099 puntos otorgará el 90% de la capacidad de crédito, y solo si llegan a 1100 puntos obtendrán el 100% de su derecho a un crédito suficiente para una vivienda digna. El problema aquí es que un gran número de trabajadoras y trabajadores nunca llegarán a juntar 110 puntos por méritos propios debido a los criterios antes mencionados.
También me parece infame, que aunque no está en la lista de criterios la están aplicando, es la revisión del Buró de Crédito. El acceder a un crédito suficiente para adquirir una vivienda digna es un derecho que está plasmado en la Constitución de nuestro país. El INFONAVIT fue creado para cumplir ese mandato constitucional con las y los trabajadores afiliados al Instituto Mexicano del Seguro Social. Como derecho de cada trabajador, no debería de influir el historial crediticio en el monto de crédito otorgado, sin embargo, si el trabajador no accede a la revisión de su historial crediticio, les descuentan hasta un 40% de su capacidad de compra. Es decir, les quitan el 40% de su derecho a acceder a un crédito suficiente para adquirir una vivienda digna. Por mas que analizamos el Articulo 123 de la Constitución no encontramos algún párrafo que mencione tal disparate, sin embargo, el INFONAVIT ha decidido actuar como si fuera una institución financiera privada y lesionar la capacidad de compra de los derechohabientes.
Resulta evidente que las políticas, lineamientos y criterios del INFONAVIT tienen como objetivo segregar a los trabajadores que menos tienen, a los trabajadores de las comunidades más apartadas. Sin importar que un trabajador cumpla con sus jornadas laborales por varios bimestres y que le descuenten su aportación y sus impuestos cada vez que cobra, si al INFONAVIT no le gusta la ubicación de su centro de trabajo o si su patrón se atrasó (justificada o injustificadamente), no podrá juntar los 1080 puntos para poder ejercer su crédito.
Con estas medidas arbitrarias, el INFONAVIT viola el artículo 123 de la Constitución, que en ninguna parte menciona todas las condiciones que ahora impone el instituto para otorgar créditos baratos y suficientes para que los trabajadores adquieran habitaciones cómodas y dignas.
ARTICULO 123
B. Entre los Poderes de la Unión y sus trabajadores.
Fracción XI Inciso f:
Se proporcionarán a los trabajadores habitaciones baratas, en arrendamiento o venta, conforme a los programas previamente aprobados. Además, el Estado mediante las aportaciones que haga, establecerá un fondo nacional de la vivienda a fin de constituir depósitos en favor de dichos trabajadores y establecer un sistema de financiamiento que permita otorgar a éstos crédito barato y suficiente para que adquieran en propiedad habitaciones cómodas e higiénicas, o bien para construirlas, repararlas, mejorarlas o pagar pasivos adquiridos por estos conceptos.
Las aportaciones que se hagan a dicho fondo serán enteradas al organismo encargado de la seguridad social regulándose en su Ley y en las que corresponda, la forma y el procedimiento conforme a los cuales se administrará el citado fondo y se otorgarán y adjudicarán los créditos respectivos.
El cambio climático es el causante de la crisis ambiental que afecta a las ciudades en la actualidad, poniendo en riesgo el bienestar de la población humana. El Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) señala que muchos de los riesgos climáticos emergentes se encuentran en las ciudades, espacios en donde habita más del 50% de la población mundial y en donde toma lugar gran parte de la actividad comercial e industrial generadora de riqueza y bienestar para la sociedad global. Las zonas urbanas ocupan tan sólo el 2% de la superficie total del planeta; sin embargo, demandan una enorme cantidad de recursos naturales, por ejemplo, consumen el 78% de la energía mundial y el 75% de los recursos del planeta, mientras producen entre el 60 y 80% de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
Por tal motivo, gobiernos y organizaciones a nivel mundial han identificado que las ciudades son un punto clave para la solución de muchos de problemas ambientales actuales y que, mediante estrategias adecuadas de mitigación y adaptación al cambio climático, se podrían reducir considerablemente las emisiones de GEI a corto plazo. Es importante dejar claro que por estrategias de “mitigación” se entienden aquellas acciones que moderan o disminuyen las emisiones de GEI y, por estrategias de “adaptación”, acciones que limitan los impactos, reducen vulnerabilidades e incrementan la resiliencia frente al cambio del clima de los sistemas naturales y humanos.
Una estrategia ante el cambio climático consiste en fomentar el mantenimiento, incremento e interconexión del arbolado urbano, ya que se han documentado ampliamente los beneficios de la presencia de árboles en las ciudades. Algunos de los servicios que nos brinda la vegetación urbana son los siguientes: funcionan como enfriadores naturales, sobre todo, en lugares en donde las altas temperaturas son una constante, como en la ciudad de Mérida. Esto ocurre gracias a que las hojas verdes de los árboles tienen la capacidad de reflejar la luz solar con mayor facilidad y, a diferencia del asfalto o el pavimento, no la absorben en gran cantidad. De igual manera, el efecto de la sombra y evapotranspiración permite el intercambio del agua del suelo a la planta y, posteriormente, al aire. Esto da como resultado que el ambiente sea más húmedo y que, como consecuencia, la temperatura disminuya. Otro beneficio es que mientras más áreas arboladas tenga una ciudad, su capacidad de regular las inundaciones aumenta. Esto se da porque las raíces de las plantas, junto con la microbiota del suelo (hongos, animales), crean una red de canales subterráneos que permiten que el agua pueda infiltrarse con facilidad. Cuando se sustituyen áreas con vegetación por asfalto o cemento, el suelo se compacta (es decir, se pierden los espacios aéreos de éste) y pierde su capacidad de absorber el agua. Si a esto le sumamos la contaminación por desechos sólidos que obstruyen las coladeras, el resultado es catastrófico: menor infiltración y mucho mayor inundación.
Los árboles también son filtradores de contaminantes del aire; por ejemplo, para la realización de la fotosíntesis (proceso por medio del cual las plantas crean su propio alimento) las hojas necesitan energía solar, agua, sales minerales y dióxido de carbono (CO2). Este último es uno de los principales gases de efecto invernadero, causante del calentamiento global. Entonces, coloquialmente hablando, los árboles absorben CO2 (gas contaminante) para realizar la fotosíntesis y uno de los resultados de este proceso es el oxígeno, gas sin el cual los seres vivos no podríamos existir, ya que es fundamental para el sustento de la vida.
Un beneficio más de los bosques urbanos se ve reflejado en el bienestar social, ya que diversos estudios sociales en entornos urbanos demuestran que las áreas verdes tienen efectos directos en la salud, tales como disminución de la obesidad, del estrés, de enfermedades mentales y cardiorrespiratorias, así como también, disminución en los niveles de violencia, temas de vital importancia en la actualidad, es decir, en tiempos de pandemia.
Finalmente, otro de los grandes beneficios de los bosques en las ciudades, es que, al albergar y contener una gran diversidad de organismos vivos, mantienen la funcionalidad del ecosistema urbano en conjunto. Por ejemplo, en estos parches de vegetación viven mamíferos, anfibios y reptiles, los cuales son controladores de ratas, ratones, moscos y chinches, animales que transmiten enfermedades que afectan a los seres humanos. De igual manera, en estos bosques habitan aves, insectos (como avispas y abejas), y mamíferos voladores (como murciélagos), los cuales fomentan la dispersión de las semillas de los árboles y la polinización de éstos.
Mérida es una ciudad que cuenta con grandes espacios de vegetación dentro de la zona urbana; sin embargo, en los últimos años, ha aumentado la inmigración a la ciudad, fenómeno que posiblemente se deba a que actualmente está considerada como una de las ciudades con mejor calidad de vida y con mayor crecimiento económico dentro de México. Debido a esto, la mancha urbana está creciendo de manera acelerada (995,129 habitantes hoy en día) y existe un mercado desmedido de constructoras e inmobiliarias que están impactado drásticamente la selva yucateca y su biodiversidad, así como los recursos naturales en general y, por consiguiente, la funcionalidad del ecosistema. Es sumamente importante, que la industria de la construcción tenga presente las características ecológicas locales; que conozca y esté consciente de los inminentes efectos del cambio climático en Mérida (inundaciones, huracanes de mayor fuerza y frecuencia, olas de calor más intensas), y que tenga presente los beneficios de los bosques urbanos como una de las estrategias de mitigación y adaptación al cambio climático.
La divulgación e implementación de estas estrategias ante el cambio climático debe ser una prioridad en los diferentes niveles de gobierno en conjunto con la ciudadanía, organizaciones civiles, academia e iniciativa privada para garantizar la sostenibilidad de los recursos naturales de Mérida y del estado de Yucatán.
1905 Carta de Ricardo Flores Magón al Sr. Francisco I. Madero.
Saint Louis, Missouri, marzo 5 de 1905
Sr. Francisco I. Madero
San Pedro, Coah.
Estimado señor y muy fino amigo:
Me había sido imposible escribir a U. de ésta. Al principio no lo hice porque temí dirigirme a U. en la forma en la que lo había hecho antes, al saber que estaban violando la correspondencia de Us. y aún temí por un tiempo que no hubiera llegado a poder de U. mi última carta de San Antonio.
Después, cuando ya recibí la amable contestación de U. a esa carta quise escribirle luego, pero un cúmulo de trabajo originado de la necesidad de sacar el periódico con la exactitud que el correo requiere para justificar un buen informe que acredite la concesión del registro en Washington, me impidió hasta hoy, Contra mi voluntad, escribir a U.
Refiriéndome a su grata última fecha 22 de febrero, le manifiesto que su segunda libranza por $ 900.00 endosada a mi favor y remitida para su cobro a Nueva York, me fue ya pagada, así como la primera de $ 600.00 que envié de San Antonio para su cobro.
Repito a U. lo que le dije en mi anterior. A no ser por U. hubiéramos marchado, dada nuestra difícil situación en San Antonio, al desastre, a la derrota, a la anulación completa de nuestros trabajos y de nuestros esfuerzos por las maquinaciones del Gobierno, sin duda con más influencia, con su oro corruptor, que nosotros desprovistos de elementos y arrojados sin defensa a una lucha tan desigual.
U. no puede comprender lo que le hemos agradecido su valiosísimo servicio y la deuda de gratitud sincera que contraemos hacia U., no sólo por el favor personal y las ventajas de tranquilidad y de relativo desahogo que hemos podido tener en nuestro cambio y la nueva instalación de nuestros trabajos, sino porque la causa que sostenemos la amamos tanto que preferiríamos morir a no luchar por ella pues con ella sentimos identificada nuestra alma y nuestra vida que no creemos emplear mejor que consagrándola a la defensa de nuestro pueblo tan noble y generoso cuanto desdichado bajo el régimen de la tiranía que le ha tocado en lote sufrir a pesar de sus gloriosos esfuerzos de épocas pasadas en que por él murieron y lucharon hombres tan puros y desinteresados como lo fueron, para no hablar sino de épocas recientes, nuestros padres de Ayutla y la Reforma.
A no ser, sinceramente, por la oportuna y por lo mismo inapreciable ayuda de U. ese ideal de lucha se hubiera hundido, nos habríamos visto anonadados bajo el peso de la tiranía y reducidos a la desesperación y la impotencia.
Cuando U. reciba ésta ya habrá visto los dos primeros números sacados aquí y aunque malejos porque los hemos escrito en medio de la confusión y el aturdimiento que el exceso de menudo trabajo del cambio y reinstalación nos ha ocasionado, preferimos que salieran así y también mal impresos por la falta de acentos, eñes, y otras, antes que interrumpir la aparición y producir un ligero decaimiento de ánimo de nuestros correligionarios si tal suspensión aunque momentánea hubiera ocurrido.
Tan luego como nos llegue la letra, entraremos de lleno a nuestro trabajo normal y eso será en breve pues la empacamos y remitimos de San Antonio desde nuestra salida. En cuanto al registro esperamos obtenerlo a juzgar por la buena acogida que nuestro periódico recibió de parte de este Postmaster, quien al revisar nuestras listas y comprobantes de suscriptores tuvo el cumplimiento de decirnos que pocos periódicos había aquí tan: bien arreglados y ordenados como el nuestro. Así es que hay que esperar que su informe sea favorable y que pronto tengamos de Washington una favorable resolución.
Camilo no se quedó en San Antonio. Hemos hablado mucho y, como todos nosotros, está ansioso de trabajos más importantes, eficaces y rápidos, los que consideramos ya viables si en un noble esfuerzo se reúnen los elementos siquiera indispensables.
Ha lamentado que esta ocasión de conferenciar con U. no se haya aprovechado; pero cuando a U. se le facilite, por sus muchos negocios, venir, Camilo podrá ir a encontrar a U. a San Antonio y aun sería preferible que a Austin para hacer la entrevista menos visible pues en San Antonio podría traslucirse por el numeroso elemento mexicano que allí reside, lo que [en] Austin, a sólo tres horas de allí, no sucedería ya. U. puede avisarnos con la anticipación que crea oportuna por carta o por telegrama convencional que hable de cualquier asunto para que señale una fecha, que ya entenderemos que es la de la entrevista en Austin, qué día fija U., rogándole que su carta o telegrama lo mande con el nombre y dirección que ya tiene y usó en su última, pero suprimiendo la inicial intermedia del nombre para que la persona de esa dirección sepa que ésa es correspondencia exclusivamente para nosotros.
Espero, como siempre con gran empeño, las noticias que U. se sirva comunicarme, y U. hágame las indicaciones necesarias dado su pleno conocimiento del estado de los asuntos.
Sabe U. que queda como siempre a sus apreciables órdenes, su afmo. amigo y correligionario
Ricardo Flores Magón